Se inicia colocando en pecho pequeños discos de metal denominados «electrodos», ellos se encuentran conectados a cables denominados «derivaciones» que a su vez están conectados al equipo que posee una pantalla, que registra la actividad eléctrica del corazón (Electrocardiograma) y al observar esta pantalla, los médicos pueden identificar y registrar los cambios eléctricos del corazón mientras el paciente hace ejercicio.
Durante la prueba, le pedirán que camine sobre una cinta o banda sin fin (Caminador); cada 2 o 3 minutos, el médico aumentará la velocidad y la pendiente de la cinta sin fin, para simular la sensación de caminar cuesta arriba. El médico tratará de detectar cambios en el trazado del electrocardiograma y en los niveles de presión arterial, lo cual podría indicar que el corazón no está recibiendo suficiente oxígeno y se continúa hasta que se alcance la frecuencia cardiaca deseada, a menos, que se presenten complicaciones como dolor torácico o elevación exagerada en la presión arterial.
El monitoreo se continúa de cinco a diez minutos después del ejercicio o hasta que la frecuencia cardiaca vuelva a sus niveles iníciales.
Con esta ayuda diagnostica sometemos al corazón a condiciones de estrés, para obtener un aumento de la frecuencia cardiaca a niveles previamente establecidos de acuerdo con la edad del paciente y sus condiciones particulares y tratar de identificar si hay deficiencia en la circulación de las arterias coronarias porque están obstruidas, lo cual se va a reflejar en los trazos electrocardiográficos en un gran porcentaje de los casos y lo cual puede variar según la severidad de la enfermedad coronaria.
¿Qué puedo esperar?
No es necesario ningún tipo de preparación diferente a las instrucciones entregadas a usted el día de la solicitud de la cita; normalmente, suele tomar un máximo de 30 minutos su realización.
La preparación de los sitios de colocación de los electrodos en el tórax puede producir un ardor o sensación de picazón leve, sin consecuencia alguna El esfigmomanómetro (Tensiómetro) en el brazo se irá inflando cada cierto tiempo, produciendo una sensación de aprisionamiento que puede sentirse firme. Se tomarán mediciones iníciales de la frecuencia cardíaca y la presión arterial antes, durante y después de comenzar el ejercicio. En muy pocas ocasiones, las personas experimentan molestia en el pecho, palpitaciones, mareo o dificultad para respirar durante el examen. Al finalizar la prueba, el médico le indicará una fase de relajación durante la cual le pedirá que se acueste o se siente y descanse.
Después de la prueba podrá comer, beber y reanudar sus actividades normales. Los resultados anormales pueden mostrar arritmias durante el ejercicio, estrés en el corazón provocado por el ejercicio, una posible arteriopatía coronaria (bloqueo en las arterias) o falta de buen estado aeróbico.
No dude en preguntar al personal de salud que lo atenderá, sus dudas o interrogantes con respecto al estudio diagnostico a realizar.
¿Cuáles son los riesgos?
Las pruebas de esfuerzo generalmente son seguras. Rara vez, se presenta un ataque cardíaco o un ritmo cardíaco irregular peligroso, pero de suceder, el paciente está en la mejor posición para recibir atención médica.
Generalmente, los pacientes que tienen probabilidades de sufrir tales complicaciones de antemano son conocidos por tener corazones débiles, así que no se les realiza el examen.
El procedimiento puede reproducir el dolor que el paciente ha venido presentando y por el cual consultó a su médico, pero como se hace vigilancia permanente con monitores y asistencia del médico, el examen puede ser detenido en el momento en que se considere necesario. También es posible la presencia de otras complicaciones no mencionadas en el presente documento por ser de rara ocurrencia como el infarto del miocardio y en casos aislados derivado de la severidad de la enfermedad que ya tenga el paciente pueden presentar alteraciones del ritmo cardiaco (Arritmias) que pueden conducir a la muerte si no hay un tratamiento hospitalario y médico inmediato.
El ejercicio que se hace en la banda sinfín es equivalente al que puede hacer una persona en sus condiciones normales. Las personas que no están acostumbradas a realizar ejercicio pueden presentar algo de dificultad en el desarrollo de la ayuda diagnostica e incluso tener desvanecimientos o desmayos, los cuales son manejados por el personal asistencial que lo asiste en la realización del estudio.